En la actualidad, el uso de césped artificial en las pistas de pádel ha ganado mucho protagonismo gracias a todas las ventajas que ofrece. Por eso, son cada vez más los centros deportivos que deciden su colocación en lugar de los revestimientos tradicionales que se usaban antaño.
En general, podemos decir que las ventajas más destacadas del césped artificial en su aplicación para pistas de pádel son:
- Ofrece una superficie estable para el juego, permitiendo que el jugador pueda desplazarse sobre ella cómodamente.
- Permite que la pelota tenga un comportamiento natural en su rebote, de esta forma permite un juego más fluido.
- Es más seguro para los jugadores, ya que reduce la posibilidad de impactos y, en caso de impacto, minimiza las lesiones, gracias a la capacidad de amortiguación que ofrece el césped.
- Tienen un mantenimiento fácil y económico, que no resulta costoso y se centra en la limpieza periódica, la redistribución de la arena y la eliminación o prevención de hongos y musgo.
La composición del césped artificial
Soporte de base
También denominado backing. Es la superficie que va pegada al suelo y que se compone de una o dos capas de polipropileno. Sobre este soporte se adhieren las fibras o filamentos que compondrán el césped.
Fibras
Las fibras son los filamentos que forman el césped y su altura depende de cada modelo, aunque puede rondar los 10-15 mm. Están elaboradas principalmente por polietileno, que tiene un excelente comportamiento y durabilidad.
Arena
El césped artificial que se emplea en pistas de pádel, lleva un relleno de arena que va a garantizar la estabilidad de las placas de césped, evitando que puedan desplazarse, además de contribuir a mantener el espesor y verticalidad de las fibras.
En cuanto a los tipos de césped artificial que se emplean en las pistas de pádel, podemos distinguir entre:
Césped monofilamento
El césped monofilamente es lo que se conoce como moqueta y está compuesto de fibras estrechas y cortas que se disponen sobre la superficie sin seguir patrones establecidos, y de forma individual e independiente unas de otras.
La ventaja del césped monofilamento es que aporta una mayor durabilidad y mejor conservación con el paso de los años. En estos casos, la arena está menos apelmazada, por lo que será necesario llevar a cabo de forma más frecuente las tareas de redistribución de la arena sobre la pista para evitar irregularidades que puedan interceder en el correcto desempeño del juego.
Césped fibrilado
El césped fibrilado se caracteriza porque el tramo superior de cada filamento se corta creando una especie de plumeros que parten del mismo nervio.
Este tipo de césped tiene el inconveniente de que al ser menos denso que el monofilamento, se desgasta con mayor rapidez, por lo que es menos duradero y requiere antes su sustitución y de un mantenimiento más frecuente para que no se apelmacen las fibras.